Estudios confirman que durante la hipnosis los sujetos no están en un estado somnoliento, sino despiertos.
El hipnotizador, haciendo oscilar un reloj de bolsillo ante los ojos del sujeto, entona lentamente: “Tienes sueño… Tienes sueño…” La cabeza del sujeto cae de forma abrupta. Está en un profundo trance similar al sueño, ajeno a todo salvo a la suave voz del hipnotizador. Sin poder para resistirse a la influencia del hipnotizador, el sujeto obedece cada orden, incluyendo una instrucción para realizar una escena infantil. Al “despertar” del trance media hora después, no recuerda nada de lo sucedido.
De hecho, esta descripción familiar, captada en incontables películas, encierra una gran cantidad de conceptos equivocados. Pocos, si es que hay alguno, de los hipnotizadores modernos usan el famoso reloj introducido por el cirujano ocular escocés James Braid a mediados del siglo XIX. Aunque la mayor parte de los hipnotizadores intenta calmar a los sujetos durante la “inducción”, tal relajación no es necesaria; incluso se ha hipnotizado a gente que pedaleaba vigorosamente en una bicicleta estática. Estudios electroencefalográficos (EEG) confirman que durante la hipnosis los sujetos no están en un estado adormilado, sino que están despiertos — aunque a veces un poco somnolientos. Además, pueden resistir libremente la sugestión del hipnotizador y están lejos de ser autómatas sin mente. Finalmente, la investigación realizada por el psicólogo Nicholas Spanos de la Universidad Carleton en Ontario demuestra que un fallo al recordar lo que sucedió durante la sesión hipnótica, o amnesia post-hipnótica, no es un elemento intrínseco de la hipnosis y normalmente sólo ocurre cuando a los sujetos se les dice que es posible que ocurra […]
Fuente: Ciencia Kanija
Autor de la traducción: Manuel Hermán (Kanijo)
Fecha: 12-01-2009
Artículo original: “Is Hypnosis a Distinct Form of Consciousness?”
Fuente: Scientific American
Autores: Scott O. Lilienfeld and Hal Arkowitz
Fecha: 01-2009
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